A mediados de septiembre, más concretamente entre el 20 y el 21 de septiembre se produce la luna de las cosechas, normalmente está la luna acompañada de Jupiter en estas fechas, esta luna es la luna más próxima al principio del otoño, a veces coincide y  otras no coincide con el inicio de esta estación estival, esto no coincide desde el 23 de septiembre del 1991 y no se dará esta coincidencia hasta el año 2029.

Es una de las lunas más luminosas que se ven en el cielo del iniciado otoño, pero por esta fecha también sucede otro fenómeno en la naturaleza asociado a la luna de las cosechas, la aparición de las avispas en los hogares o en nuestras instalaciones. Por estas fechas las avispas están nutriéndose principalmente de frutas caídas(higos, membrillo, granada, etc).

 Al llegar al otoño, la reina deja de poner huevos y las obreras cada vez tienen menos trabajo que hacer. Entonces es cuando las avispas se entregan a otras ocupaciones más placenteras: dejan de cazar orugas y se dedican a las frutas y principalmente a elementos ricos en fructosa o sacarosa. En esta época se vuelven verdaderamente molestas, pero en realidad no hacen mucho daño. Es difícil mantener la calma cuando las avispas revolotean alrededor de nuestras cabezas. Los insectos no se marcharán por el hecho de que los ignoremos, pero tampoco picarán. Con un simple gesto de abrir las ventanas y echarlos con un folio enrollado, o un plumero se marcharán o espantarán, lo más probable es que se vayan. Deberíamos permitir que las avispas disfruten de un descanso bien merecido, (son insectos beneficiosos), morirán en cuando lleguen los primeros fríos. Los machos, que se distinguen por sus antenas mucho más largas, pueden unirse a la fiesta, pero para esta época la mayoría de ellos ya han desaparecido, después de aparearse con las reinas nuevas que se alimentan en las flores de las plantas otoñales como la hiedra,preparándose para la hibernación.

 El mensaje de la bajada de temperaturas y ese faro de la luna de las cosechas les empuja a buscar refugio, no quiere decir que estas estén anidando en esta época. Las avispas no son realmente agresivas, pero si suelen picar a todo aquel que se interponga en su camino cuando se dirigen a al avispero o salen de él.  Hemos de recordar que son las reinas jóvenes los únicos individuos del avispero que sobreviven al invierno. Muchas se resguardan en cavidades bajo la corteza de los árboles, en viviendas, etc, listas para salir en cuando aparecen las primeras flores de la primavera, justo después de la floración del Níspero, en nuestras latitudes